En nuestro gabinete llevamos a cabo valoraciones mediante los más prestigiosos tests y pruebas psicométricas. NO REALIZAMOS VALORACIONES NI INFORMES PERICIALES para procesos judiciales. Las evaluaciones que realizamos tienen una finalidad y una validez exclusivamente clínica.
Evaluando capacidades, personalidad y bienestar mental
La inteligencia es un constructo psicológico que recibe diversas definiciones dentro de la Psicología. Podría decirse que hace referencia a la capacidad de la persona para hacer frente o dar respuesta a tareas que impliquen lógica o razonamiento, pero implica funciones verbales y no verbales. Se trata de algo que puede medirse, pero no modificarse, pues viene dada por factores biológicos desde el nacimiento.
La medida más universal de inteligencia se llama C.I. o Cociente Intelectual, que es una cuantificación global de la inteligencia de una persona y nos permite asesorarla en cuanto al nivel de desempeño académico o profesional que puede estar en condiciones de desarrollar. La prueba más ampliamente empleada en este ámbito es la Escala de Inteligencia de Weschler, que, además de la medida global o C.I., también arroja resultados sobre otras funciones intelectuales como Velocidad de Procesamiento, Memoria de Trabajo, Razonamiento Perceptivo o Comprensión Verbal.
En nuestra consulta disponemos de pruebas para valorar inteligencia en niños a partir de 6 años, jóvenes y adultos.
El deterioro cognitivo es un déficit de las capacidades que nos permiten hacer frente a tareas cotidianas. Entre estas capacidades se cuenta la memoria a corto o largo plazo, el lenguaje, el razonamiento, la orientación, la atención, la planificación…
En la actualidad son cada vez más frecuentes los casos de deterioro cognitivo asociados a una Demencia Degenerativa Primaria. Suelen suceder habitualmente a partir de los 60 años y las más comunes son la demencia asociada a la enfermedad de Alzheimer o al Parkinson, pero existen otras modalidades y pueden tener también un inicio más temprano. También es posible que el deterioro se presente de forma súbita fruto de una lesión o de un ACV (accidente cerebrovascular) o Ictus, en cuyo caso el daño es más recuperable si se interviene con prontitud.
Para llevar a cabo un estudio de un posible deterioro cognitivo disponemos de un extenso material que nos permite realizar una valoración neuropsicológica concreta y fiable.
Éste déficit es definido como un patrón persistente de falta de atención o concentración en al menos dos ámbitos diferentes (es decir, no es suficiente con que la inatención aparezca sólo en el ámbito escolar para ser diagnosticado) o un patrón de excesiva actividad que interfiere con el normal funcionamiento en varios contextos. Ambos síntomas también pueden aparecer de forma conjunta.
El TDAH es un diagnóstico clínico, por lo que mediante la recogida de información en la entrevista clínica y las escalas cumplimentadas por parte de padres, profesores y otros adultos es suficiente para llegar a una conclusión sobre su presencia o ausencia, pero es común y suele ser conveniente apoyar el diagnóstico con pruebas psicométricas complementarias.
Disponemos de tests para valorar un posible déficit atencional a partir de los 7 años, así como para jóvenes y adultos.
La personalidad es un patrón estable y duradero en el tiempo que define nuestra forma habitual de pensar, sentirnos y comportarnos en la mayoría de situaciones. Los rasgos de personalidad incluyen un abanico muy amplio de manifestaciones, desde la estabilidad emocional, hasta la apertura a la experiencia o la extroversión, por mencionar algunos.
La personalidad se va configurando desde la infancia fundamentalmente mediante las vivencias, empieza a manifestarse más claramente en la juventud y se consolida al inicio de la vida adulta, para mantenerse estable desde entonces. Algunos patrones de personalidad interfieren o dificultan la adaptación a distintas facetas de vida, son los llamados trastornos de la personalidad.
Tanto si el objeto de estudio son los rasgos de la personalidad normal como si lo son los trastornos de la personalidad, disponemos de cuestionarios y tests para adolescentes y adultos.
La valoración del estado clínico de una persona pretende concretar el tipo de síntomas y otras manifestaciones psicopatológicas que pueda presentar, así como su intensidad y frecuencia. Cuando los síntomas aparecen de manera constante en el tiempo se considera que la persona presenta un cuadro clínico o trastorno mental.
Si bien el diagnóstico de los trastornos mentales se puede realizar mediante entrevista clínica realizada por un especialista en psicología clínica o un especialista en psiquiatría, algunas veces es recomendable obtener alguna medida complementaria mediante tests y cuestionarios que refuercen la hipótesis clínica del profesional. También pueden emplearse estos tests como una medida de la evolución o mejoría a lo largo de la terapia.
Con la finalidad de valorar el estado clínico de nuestros pacientes disponemos de pruebas válidas y fiables para jóvenes y adultos.
En Psicología Clínica Burgos ofrecemos intervenciones personalizadas y eficaces. Cada historia es escuchada, cada persona valorada, y cada paso hacia adelante es un logro conjunto.